Con motivo de la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, este 19 de junio, en que también se celebra la 25ª Jornada mundial de oración por la santificación de los sacerdotes, que instituyó San Juan Pablo II en 1995, hemos repasado algunos de los textos en que el Santo Padre Francisco se refirió a esta devoción, cuyo sentido es “que nos envuelva la fidelidad humilde y la mansedumbre del amor de Cristo”
Al recordar que el Señor se definió a sí mismo diciendo: “Aprendan de mí, que soy manso y humilde de corazón”, el Santo Padre explicaba que “el sentido de la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, que celebramos hoy, es que descubramos cada vez más y nos envuelva la fidelidad humilde y la mansedumbre del amor de Cristo, revelación de la misericordia del Padre”:
“Podemos experimentar y gustar la ternura de este amor en cada estación de la vida: en el tiempo de la alegría y en el de la tristeza, en el tiempo de la salud y en el de la enfermedad y la dificultad”
“Jesús, que mi corazón se parezca al tuyo”
Y precisamente hace pocos días, a la hora del Ángelus dominical del pasado 7 de junio, desde la Plaza de San Pedro, el Papa recordaba al mundo que este mes está dedicado de manera especial al Sagrado Corazón de Cristo, “una devoción que une a los grandes maestros espirituales y a la gente sencilla del pueblo de Dios”. Francisco decía que “en efecto, el Corazón humano y divino de Jesús es la fuente de donde siempre podemos obtener misericordia, perdón y ternura de Dios”. A la vez que sugería que “podemos hacer esto reflexionando sobre un pasaje del Evangelio, sintiendo que en el centro de cada gesto, de cada palabra de Jesús, en el centro está el amor, el amor del Padre que ha enviado a su Hijo, el amor del Espíritu Santo que está dentro de nosotros. Y podemos hacerlo adorando la Eucaristía, donde este amor está presente en el Sacramento”.
“De este modo – proseguía el Santo Padre – nuestro corazón también, poco a poco, se volverá más paciente, más generoso, más misericordioso, imitando el Corazón de Jesús”. Y llegado a este punto el Papa decía que hay una antigua oración, que él aprendió de su abuela y que reza: “Jesús, haz que mi corazón se parezca al tuyo”. A lo que añadía:
“Es una hermosa oración. ‘Haz mi corazón semejante al tuyo’. Una hermosa oración, pequeña, para rezar este mes. ¿La decimos juntos ahora? ‘Jesús, que mi corazón se parezca al tuyo. Otra vez: ‘Jesús, que mi corazón se parezca al tuyo’”
El miércoles 17 de junio sobre el tema de la oración de Moisés – cuya catequesis impartió desde la Biblioteca Privada del Palacio Apostólico – en sus saludos el Papa recordaba la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús que se celebra hoy, definiéndola “una fiesta tan querida por el pueblo cristiano”. De ahí su invitación”
“Los invito a descubrir las riquezas escondidas en el Corazón de Jesús, a aprender a amar al prójimo”
Sugerencia del Papa en este día tan especial
De la misma manera, al saludar a los fieles de lengua española que, como todos los demás, seguían esta catequesis a través de los medios de comunicación social, el Santo Padre recordaba la celebración de hoy diciendo que en la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús se celebra la Jornada de santificación sacerdotal. De ahí su sugerencia en este día tan especial:
“Los animo a rezar por los sacerdotes, por su párroco, por aquellos que están cerca de ustedes y conocen…, para que a través de su oración el Señor los fortalezca en su vocación, los conforte en su ministerio y sean siempre ministros de la Alegría del Evangelio para todas las gentes”
No hay comentarios.:
Publicar un comentario